Todo lo que debes saber sobre los tipos y el estado de la piel. Diagnóstico. Cosmética. Bio-faciales.
¡Bienvenida a un nuevo artículo en nuestro blog de estética y belleza!
Sabemos que la salud de la piel siempre ha sido una de las preocupaciones más recurrentes para las mujeres y cada vez más también para los hombres. Y por ello, seguro que muchas veces te habrás preguntado ¿Qué tipo de piel tengo? O incluso ¿Cómo será mi piel del futuro?
Si te suena familiar, no te preocupes porque hoy te voy a contar, detenidamente y en este artículo del blog Carmen Secrets, centro de belleza natural, cuáles son todos los biotipos de piel que existen para que puedas identificarlos, correctamente, sobre todo antes de realizar un tratamiento estético facial en el salón de belleza.
¿Me acompañas en el cuidado de tu piel?
Es importante saber que podemos utilizar diversos criterios para clasificar, adecuadamente, los biotipos de piel que existen. A grandes rasgos, podemos agrupar la información en tipos de piel y también en estados de la misma.
Si bien, también existen, otras mediciones por razones especialmente fisiológicas. Estas están vinculadas directamente con las características de cada superficie que encontramos en la piel.
Asimismo, los biotipos cutáneos se relacionan también con las secreciones a causa del sudor, las glándulas sebáceas formadas en el manto hidrolipídico de la piel, porque todo ello constituye una capa natural que forma un equilibrio adecuado capaz de proporcionar un estado de lubricación, elasticidad o/ y humectación óptima en la piel.
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En Carmen secrets no sólo realizamos un estudio personalizado morfológico, también contamos con Skin Diagnosis 3D, un dispositivo que nos ayudará a profundizar en la hipodermis, con un text que medirá poros, elasticidad, humectación, manchas, sensibilidad, nivel de lípidos o grasa, arrugas, sensibilidad, etc.
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En ese sentido y desde una perspectiva cosmética, podemos decir que los biotipos de la piel se clasifican según muchas de sus propias particularidades como el grosor, la calidad, la edad, el momento o la época en el que la diagnósticamos, la situación hormonal, y otros factores que explicamos en nuestra consulta.
Veamos pues las clases de biotipo de piel más importantes:
Piel eudérmica o normal
Este tipo de piel es aquella que posee un equilibrio secretorio sebáceo y sudoral de forma perfecta. Entre sus principales características, resalta su particular superficie lisa, que es muy suave al tacto y además muestra un color y brillo uniformes. De esta manera, la piel eudérmica no posee ningún tipo de aspecto antiestético dado que sus poros son poco visibles.
Es importante resaltar que este tipo de piel mantiene una hidratación ideal en todo momento, siendo regulada por la actividad biológica que se desarrolla sobre todo en la capa basal. Por otro lado, las capas más profundas tienen un equilibrio constante y evitan, eficazmente, la formación prematura de las molestas arrugas.
A su vez, la piel normal tolera muy bien todo tipo de productos en el mercado destinados para la piel, ya que no manifiesta en ningún momento la aparición de escamas y resiste incluso las temperaturas más extremas.
Pieles seca o alípica
Las pieles secas son un problema muy común que se percibe especialmente durante los meses más fríos. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la piel seca se produce, básicamente, por la pérdida de agua o la ausencia de grasa en ella. Frecuentemente, estos dos estados coexisten entre sí produciendo, de forma irremediable, una sequedad bastante evidente al simple tacto con la piel.
Las pieles alípicas se caracterizan principalmente por ser tensas, muy finas, estriadas y con un efecto reactivo a los estímulos exteriores. Usualmente, las pieles secas presentan telangiectasias (pequeñas “arañitas”), es decir una textura poco elástica y con los poros imperceptibles. De la misma manera, muestran una coloración opaca sin brillo, una textura rugosa con descamación fina y una tendencia muy pronunciada a la aparición de arrugas.
Piel grasa
Este tipo de pieles son las que generalmente presentan una textura gruesa con los folículos pilosebáceos muy dilatados. Las pieles grasas también se caracterizan por tener una superficie húmeda gracias a su hidratación excesiva. En consecuencia, estas pieles son resistentes a la aparición de las arrugas, ya que su superficie, especialmente untuosa, contribuye a mantenerla en un buen estado y humectación por mucho más tiempo.
Cabe destacar que las pieles grasas resisten, eficazmente, a la acción de agentes externos producto de la secreción sebácea, la cual se encuentra localizada en las denominadas zonas seborreicas fisiológicas.
Piel mixta
La principal particularidad de las pieles mixtas se centran en la coexistencia de varios tipos de pieles que se encuentran en una misma persona. Por ello, los cuidados deben ser más constantes para evitar que los extremos, en casos de sequedad o hidratación excesiva, terminen afectando completamente al biotipo de la piel.
Piel sensible
Este tipo de piel es una de las que más frágiles ante los agentes externos. Se caracterizan por presentar casos de enrojecimiento en la piel, intolerancia al uso de cosméticos, alergias manifestadas con picores, entre otros factores. Su alta sensibilidad se debe, principalmente, a que su barrera cutánea está alterada, produciendo así una respuesta insuficiente ante los estímulos externos. Sin duda, este tipo de piel es de las que más cuidados necesita ya que son vulnerables con bastante facilidad.
Veamos también algunos de los estados más destacados:
Piel hidratada
La hidratación cutánea se produce por la utilización de reserva del agua que se produce desde las capas inferiores de la piel. Cuando hablamos de una piel hidratada entonces nos referimos a un biotipo de piel que cuenta con una alta sensibilidad, ya sea producto de los cambios atmosféricos, los climas extremos especialmente durante los meses más fríos.
Piel deshidratada
Las pieles que carecen de una hidratación adecuada se caracterizan porque su contenido hídrico disminuye notablemente en la capa córnea. Esta disminución se debe comúnmente a motivos fisiológicos, la densidad del agua en la dermis y cuando las capas inferiores son insuficientes. Por lo general, las pieles deshidratadas se ven afectadas por factores externos tales como el viento, los climas extremos o el uso de productos químicos para la limpieza.
Envejecimiento
La piel sufre con el paso del tiempo un descenso de la regeneración tisular que permite de forma fisiológica la oxidación de los tejidos.
La epidermis se vuelve más delgada y es menos eficiente para regenerarse. En la dermis disminuye la producción de colágeno, lo que da lugar a mayor flacidez. Y en el tejido subcutáneo perdemos células adiposas, de modo que disminuyen su volumen y elasticidad.
Esto sucede de forma natural y objetivamente lo podemos apreciar cuando de manera paulatina aparecen arrugas, líneas de expresión, y pérdida de volumen y de firmeza (menor densidad de tejido).
Manchas
Las manchas en la piel (resumidamente) se producen por una alteración en el proceso de pigmentación natural cutáneo.
Existen manchas hiperpigmentadas o hipercrómicas, hormonales o melánicas (este tema requeriría otro blog completo para profundizar).
A grandes rasgos las que más preocupan son las seniles, relacionadas con la exposición al sol, el melasma o cloasma, que se puede agravar en el pico estrogénico del embarazo.
Nevus melanocíticos, que son neoformaciones de melanocitos (lunares) de forma circular y que pueden estar sobreelevados.
Melanoma. Neoplasia maligna de melanocitos de bordes irregulares y con pigmentación anómala que crece progresivamente y puede dar metástasis a distancia. Te recomendamos que siempre que tengas alguna duda con cualquier mancha, consultes con tu dermatólogo (Regla, Asimetría, Borde, Color, Diámetro, Evolución).
Manchas hipopigmentadas (hipocrómicas)
Vitíligo. Se trata de una enfermedad autoinmune que provoca la desaparición de la pigmentación.
Piel acnéica o Maskné
El acné es un sinónimo de incomodidad y molestia. Este tipo de piel se caracteriza por mantener un brillo constante en el biotipo de la piel, presentando lesiones acneicas con los poros bastante visibles. De la misma forma, la piel acnéica produce una secreción sebácea alterada que contribuye a la aparición de infecciones cutáneas, produciendo quistes, comedones y milliums, entre otras lesiones
El acné vulgaris es una afección cutánea caracterizada por un exceso de producción de sebo. Existen diferentes tipos de lesiones cutáneas (comedones, pápulas, pústulas y nódulos).
Se caracteriza por una hiperproliferación epidérmica folicular (las células no se descaman), un exceso de producción de sebo que produce un bloqueo de los poros, y por tanto lesiones cutáneas que provocan inflamación y aumento de la actividad del Propionibacterium acnes.
Actualmente y con el uso de la mascarilla se ha denominado MASKNE (que se merece un futuro artículo completo en el blog)
Rosácea o cuperosis
La rosácea es una alteración crónica cutánea que afecta al rostro y produce enrojecimiento (flushing) y lesiones permanentes localizadas en la zona central de la cara (mejillas, frente, nariz, boca y mentón).
Puede causar telangiectasisas (dilataciones vasculares), pápulas-pústulas (lesiones que contienen pus), rubefacción, síntomas oculares (prurito o blefaritis) o engrosamiento de la superficie de la piel que afecta a la nariz (rinofima), la frente, los pómulos, el mentón, las orejas o los párpados.
Otras afecciones con la dermatitis, piel atópica también son consideradas estados de la piel.
Esperamos que con este artículo hayas aprendido algo más sobre todos los estados y biotipo de piel que existen para la cosmetología y la estética.
En Carmen Secrets queremos ayudarte a que tu piel siempre esté sana y saludable para que desfiles en la pasarela de tu vida con total confianza y seguridad en ti misma.
Si estás buscando un asesoramiento estético y profesional para ti, cuenta conmigo para todo lo que necesites y te atenderé con mucho gusto poniendo toda mi experiencia a tu disposición.
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