Escucha a la fuerza de voluntad y consigue tus objetivos.
Llega el turno de escuchar a la fuerza de voluntad. Si tú lo vas alargando, pasan los días, las semanas, los meses, todo continua igual y la fuerza de voluntad no ha acompañado a tu lista de propósitos, no te preocupes porque hay tiempo y solución.
Mi objetivo hoy es ayudarte a mejorar tu fuerza de voluntad. Y para ello, lo primero que tenemos que conseguir es entender qué es la fuerza de voluntad.
Sigue leyendo y verás como después de este artículo, tu vida cambiará.
Un poquito de contexto.
Cuando nos resistimos a una tentación es cuando nos viene a la cabeza la fuerza de voluntad que necesitamos para no caer en esa “deliciosa” tentación. Por ejemplo, no comer un donut, no fumar, no volvernos locas con las rebajas y un largo etcétera. Así pues, apelamos a ella para dejar de fumar, adelgazar, hacer más ejercicio, estudiar, ahorrar, … Y siempre nos decimos que no la tenemos cuando no logramos nuestro propósito. Pero eso no es cierto. Sí podemos trabajar, entrenar y potenciar nuestra fuerza de voluntad, como si se tratara de un músculo. Pero ¡cuidado! Al igual que un músculo, la fuerza de voluntad, si se ejercita adecuadamente mejora su rendimiento, pero si se fuerza en exceso, se desgasta.
Acostumbramos a decir que lo que nos diferencia a unos y otros es su fuerza de voluntad o, como dicen los psicólogos, su capacidad de autocontrol, de evitar tentaciones y posponer satisfacciones. Esta capacidad acaba teniendo repercusión en unos hábitos de vida más saludables y, en general, en un mejor nivel y calidad de vida.
Diríamos pues que la fuerza de voluntad es una habilidad muy valorada.
Otro punto importante a destacar es la diferencia entre desear y querer algo. El deseo es algo pasajero, mientras que querer es un propósito firme, es haber tomado la decisión de conseguir algo y entregarse a esta tarea. Una persona inmadura persigue deseos y los va desechando y el que tiene madurez quiere algo con fundamento, poniendo a la voluntad por delante para conseguir su objetivo. El deseo es emocional y el querer pertenece al patrimonio de la voluntad.
Cómo podemos potenciar nuestra fuerza de voluntad (que es mi objetivo para este artículo de hoy, ayudaros a potenciarla).
- Tengamos un objetivo claro y realista.
Hay que saber bien qué se quiere y estar seguro que no se desea sino que se quiere, a pesar de las dificultades y el precio que conlleve conseguirlo. Y por supuesto, ha de ser un propósito realizable porque de nada servirá fijarse objetivos que estén fuera de nuestro alcance o incluso fijarse varios objetivos a la vez que hiciera que no se pudieran alcanzar.
2. Dividir un objetivo que sea difícil en mini-objetivos.
Si nos dividimos el objetivo en pequeñitos propósitos será más gratificante para nosotros al ir consiguiéndolos paso a paso. Nos motivará a seguir y nos subirá la autoestima.
3. Debes planificarte tu objetivo.
Lo difícil de un reto es mantenerlo cada día y no abandonar. Para ello, te recomiendo tener un plan. Y ¿cómo debe ser este plan? Debe contemplar muchas de las tentaciones que surgirán y cómo las resolveremos.
4. Que no te falte automotivación.
Para que siempre estés motivada, tienes que tener claro por qué te has fijado este objetivo. Tu motivación no decaerá si tu objetivo es algo que quieres de verdad, porque la motivación interna que surge porque es algo que quieres tú, es mucho más potente que no si es algo que te exigen.
5. Tienes que auto-cuidar tu psique.
Para ejercitar tu fuerza de voluntad necesitarás un esfuerzo cerebral intenso. Si estás débil será más fácil caer en tentaciones. Por esto, será importante comer bien, dormir bien, relajarse, estar equilibrado emocionalmente, todo ello te ayudará a mejorar tu capacidad de autocontrol.
6. Comparte tu objetivo
Que otras personas sepan por lo que estás luchando es muy bueno porque te comprometes más con el objetivo.
7. Date recomenpensas
Cada logro que consigas, celébralo, porque esto te ayudará a renovar la motivación y contribuye a que la fuerza de voluntad no se desvanezca.
Una vez hayas conseguido liderar tu fuerza de voluntad verás como muchas de las cosas que llevas a cabo se habrán convertido en hábitos. Los hábitos son conductas que repetimos muchas veces hasta que pasan a formar parte de nuestras actividades diarias. Así, estos hábitos se convierten en automáticos y ya no nos supone esfuerzo adicional.
El resultado: ¡podrás conseguir todo lo que te propongas!
Una cosita más y que es muy importante que no pase por alto. Recuerda que ponerse en marcha no es lo mismo que pasar a la acción. Para que me entiendas mejor, te pondré un ejemplo. Ponerse en marcha es buscar recetas, pasar a la acción es cocinar. Implementar es lo que te va a llevar a conseguir el resultado que quieres. Tus acciones de hoy serán tus resultados de mañana.
Espero que este artículo te ayude a partir de ahora a coger las riendas de tus propósitos y puedas conseguir todos tus retos.
Si necesitas ayuda adicional, contacta conmigo en los teléfonos 646.44.55.68 y 93.222.49.94 y de forma personalizada puedo ayudarte a conseguir tus objetivos en materia de belleza y estilo de vida saludable. Para mi siempre es un placer.
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Nos vemos en el siguiente post. ¡Un beso amores!
